
Estamos en el meridiano de la expedición y ya llevamos más pacientes de los previstos. En Dongora las sisters nos consiguen lo que habían prometido y seguramente superaremos nuestros objetivos. Es importante tener a quién atender cuando vamos a destinos tan lejanos, ir hasta allí es un gran esfuerzo de tiempo y recursos. De camino a los gabinetes improvisados empezamos a escuchar un gran bullicio, hay decenas de pacientes esperando. Nos preparamos nuestras casacas, guantes, mascarillas y nuestros frontales. La iluminación no es lo fuerte de nuestros improvisados gabinetes. Tardamos varios minutos en organizar las filas de los inscritos, a cada uno se le asignan un número para ser tratados por orden de llegada. Un primer equipo organiza el flujo de trabajo para que sean anestesiados y después pasan a los doctores. A la hora de comer ya llevamos 61 Pacientes.
